Mantener la tarima exterior en óptimas condiciones no solo contribuye a su apariencia estética, sino también a su seguridad. Para ello, es fundamental llevar a cabo una limpieza y mantenimiento adecuados para la tarima exterior. A continuación, te contamos cuáles son los pasos que debes seguir.

Limpieza y mantenimiento adecuados para la tarima exterior

Sigue estos consejos para mantener la tarima flotante exterior en buenas condiciones por mucho tiempo.

Barrido regular: 

Barrer la superficie de la tarima con regularidad, al menos una vez por semana, ayuda a eliminar el polvo, las hojas y otros residuos que puedan acumularse. Este sencillo hábito evita la formación de manchas y superficies resbaladizas, garantizando un espacio exterior seguro y limpio.

Lavado con agua y jabón: 

Realizar un lavado suave con agua y jabón neutro cada mes es una excelente forma de eliminar la suciedad superficial y mantener la tarima en buen estado. Este proceso se puede realizar con una manguera de baja presión o un paño húmedo, asegurándose de no empapar la madera, ya que la humedad excesiva puede provocar daños.

Eliminación de algas y musgo:

Estos elementos pueden provocar superficies resbaladizas y dañar la madera si no se eliminan a tiempo. Para ello, utiliza productos específicos para la limpieza de tarimas exteriores o soluciones caseras, como una mezcla de agua y vinagre en proporción 50/50. Aplica el producto sobre las áreas afectadas y frota con un cepillo de cerdas suaves para desalojar las algas y el musgo.

Inspección periódica:

Examina la tarima exterior cada dos o tres meses para detectar posibles problemas, como tablones sueltos, astillas o desgaste excesivo. Realiza las reparaciones necesarias de manera oportuna para garantizar la seguridad y longevidad de la estructura, evitando mayores daños y costos en el futuro.

Sellado y protección: 

Aplicar un sellador o protector específico para tarimas exteriores cada uno o dos años es fundamental para proteger la madera de la humedad, los rayos UV y otros factores ambientales. Este tratamiento debe realizarse siguiendo las instrucciones del fabricante y con la frecuencia recomendada, garantizando una protección adecuada y duradera.

Evitar el uso de productos abrasivos: 

Al limpiar y mantener la tarima exterior es importante evitar el uso de productos abrasivos o herramientas que puedan dañar la superficie, como cepillos metálicos o limpiadores químicos agresivos. Siempre opta por materiales suaves y productos de limpieza específicos para tarimas exteriores, asegurando un cuidado adecuado y prolongando la vida útil de la superficie.

Conclusión

Siguiendo estos consejos de limpieza y mantenimiento podrás garantizar una tarima exterior segura, duradera y estéticamente agradable, convirtiendo tu espacio al aire libre en un lugar perfecto para disfrutar y relajarse.

En conclusión, la limpieza y mantenimiento adecuados de la tarima exterior son esenciales para garantizar su seguridad, durabilidad y atractivo estético. Siguiendo los consejos y pasos mencionados en este artículo, podrás mantener tu tarima en óptimas condiciones, preservando su belleza y prolongando su vida útil. No subestimes la importancia de llevar a cabo estas tareas con regularidad y utilizando productos específicos para cuidar de tu tarima exterior. De esta manera, podrás disfrutar de un espacio al aire libre seguro, confortable y agradable por muchos años.